¿San Bono?
El líder de U2 y su complejo mesiánico humanitarioSan Bono
Tras sus eternas gafas se esconde el buen ojo de un músico que ha sabido conjugar esa fábrica de millones que es U2, con un activismo social fastuoso. “Hacer el bien resultará finalmente un buen negocio”, dijo hace poco. Acá, las mañas del primer rockero que quiere el Nobel de la Paz, salvar a los pobres del planeta y, además, seguir ganando premios Grammy. Este es el Bono que llega el 26 de febrero, más allá de las luces y el vértigo.
Nación Domingo
Por Marcos Moraga Lovera
A Bono (Paul Hewson, 1960, Dublín), vocalista de U2, no le quitan el sueño los cuestionamientos sobre la honestidad de su faceta humanitaria. Inquietud genuina, capricho de rock star, o estrategia de marketing para su banda, lo cierto es que cuando la banda irlandesa suba al escenario del Estadio Nacional, desde los parlantes emergerá algo más que música: los sermones de un hombre que declara abiertamente poseer un “complejo mesiánico”, como reconoció en un discurso a principios de mes frente al Presidente de Estados Unidos.
Y aunque Bush se limitó a elogiar a Bono e hizo vista gorda sobre el pedido de entregar un 1% adicional del presupuesto federal de EEUU para los pobres del mundo, su último encuentro con la nata de los líderes mundiales se enmarcó dentro del reflote de su carrera paralela: la de activista político. Y ese álter ego, el militante, también sube a los escenarios.
Durante las otras presentaciones del “Vértigo tour” (la gira que trae a los irlandeses a Chile) hay muchos minutos dedicados exclusivamente a la prédica social. Como cuando Bono tapa sus ojos con una venda donde se lee “coexist” (coexistir) junto a la cruz del cristianismo, la estrella de David y la media luna del Islam, o las imágenes en pantalla gigante que muestran sus reuniones con líderes mundiales, además de una petición al público para que envíe un mensaje de texto en apoyo a alguna causa humanitaria.
EL VÉRTIGO DE LA RIQUEZA
Todo ello se repetiría en nuestro país, junto a las reuniones ya solicitadas a DG Medios que Bono decida aceptar: con el Presidente Ricardo Lagos, donde podría estar presente la Presidente electa, Michelle Bachelet; con la Cámara de Diputados, que le ofreció su apoyo en la postulación al Premio Nobel de la Paz; y por último, el Consejo de Cultura, donde pretenden hacer una ceremonia con motivo de la Medalla Centenario Pablo Neruda otorgada a Bono en 2004, por la Embajada chilena en Dublín.
“¿Viste el DVD en Chicago? Hay un discurso larguísimo de Bono antes de tocar One. En un momento enfocan a The Edge y su cara lo dice todo. Está como pensando: ‘Ya, loco, quedó claro; termina’”, comenta el periodista y crítico musical Sergio Cancino, para quien la militancia de Bono no hace más que distraer de la música, verdadera causa de su estatus de “gran banda” durante los ’80. Y aventura una explicación: “Cuando uno tiene asegurada la subsistencia por seis generaciones más, la conciencia empieza a pesar y los rockeros entran en todas estas causas benéficas. Está bien que lo hagan, pero surge la sospecha de qué tan honesto es todo esto, cuando los tipos tienen cuentas bancarias con muchos ceros”.
Hay momentos clave en la carrera de U2, ligados a las mañas políticas de su líder. Con su tercer disco de estudio, “War” (1983), tuvieron un éxito tremendo en Europa, y pese a la buena acogida en el mercado norteamericano, los hits todavía eran esquivos al otro lado del Atlántico. Hasta que Bono realizó su homenaje a Martin Luther King, (Pride) In the name of love, y logró meter por primera vez un single en los Top 40 de la lista Billboard de EEUU.
Otro ejemplo: su penúltima placa, “All that you can leave behind” (2000), retrocedía lentamente en la lista de ventas Billboard, hasta empinarse en el lugar 108 para agosto de 2001. Al mes siguiente, las torres gemelas se fueron abajo, y U2 para arriba. Agotaron entradas en más de 100 conciertos de su gira “Elevation”, y cada vez que tocaron su canción “One” proyectaban los nombres de las víctimas del 11-S. Las ventas se dispararon, y “All that you can leave behind” alcanzó el puesto 25 del Billboard, a 67 semanas de su lanzamiento.
El cantante solicitó el 1% del presupuesto federal de los Estados Unidos para combatir el hambre y la pobreza en África. Hasta ahora, sólo ha recibido bonitas palabras de Bush.
LO QUE NO PUEDES DEJAR ATRÁS
En innumerables ocasiones, Bono ha relatado su experiencia en África, cuando luego de participar con U2 en uno de los conciertos “Live aid”, organizados por el músico Bob Geldof, visitó Etiopía junto a su esposa y se quedó más de un mes trabajando en un campo de refugiados.
Tampoco está en cuestión su manejo del tema africano. En un reportaje publicado por la revista “Time” en 2002, el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Paul O’Neill, relató su encuentro con el músico, quien lo sorprendió con la cantidad de datos sobre África que manejaba. Sus trabajo en el continente negro, especialmente con la organización DATA, que lucha contra el hambre y la deuda externa tercermundista, de la cual es cofundador, le valieron reconocimientos como “la persona del año de 2005”, también en la revista “Time”, junto a algunos cuestionamientos.
En la última edición con la revista inglesa “Uncut”, Paul Weller, ex líder de The Jam y Style Council, y colega de Bono en la grabación de la canción “Do they know is Christmas?” (destinada a recaudar fondos para África), dijo: “Todo eso de Bono convirtiéndose en el Papa... ¿qué mierda pretende con todo eso? Basura seudoamericana”.
Andy Zúñiga, vocalista de Lemon, el tributo chileno a U2, dice que “el activismo está ligado a la música, pero no es la causa de su éxito comercial”. El “Bono chileno” explica que al no ser un mensaje político partidista, “y centrarse en el amor o el discurso pacífico”, U2 ha sido capaz de generar simpatías transversales. Pero todavía se recuerdan las pifias que desató el 11 de febrero de 1998, fecha de su primer concierto en Chile, cuando subió al escenario a un grupo de integrantes de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos. Según confirmó Francisco Leiva, uno de los administradores del sitio de Internet u2chile.net, a su página han llegado peticiones de contacto con la banda “exigiendo una entrada al ‘Golden circle’, porque dice que son hijos de detenidos desaparecidos”.
Así, cubierto de galardones –a los cuales habría que añadir los cinco premios Grammy obtenidos el miércoles con su último álbum, “How to dismantle an atomic bomb”–, llegará a Santiago San Bono y su séquito, a ofrecer el recital de las entradas más caras de toda la gira “Vertigo”, entradas que por cierto todavía muchos de los que compraron por Internet no reciben (pese a incluir un recargo por servicio de despacho). Como explicación, vaya la declaración de Bono cuando presentó su última campaña pro África, “RED”, junto a Giorgio Armani, American Express, Converse y Gap: “Hacer el bien resultará finalmente un buen negocio”.
Tras sus eternas gafas se esconde el buen ojo de un músico que ha sabido conjugar esa fábrica de millones que es U2, con un activismo social fastuoso. “Hacer el bien resultará finalmente un buen negocio”, dijo hace poco. Acá, las mañas del primer rockero que quiere el Nobel de la Paz, salvar a los pobres del planeta y, además, seguir ganando premios Grammy. Este es el Bono que llega el 26 de febrero, más allá de las luces y el vértigo.
Nación Domingo
Por Marcos Moraga Lovera
A Bono (Paul Hewson, 1960, Dublín), vocalista de U2, no le quitan el sueño los cuestionamientos sobre la honestidad de su faceta humanitaria. Inquietud genuina, capricho de rock star, o estrategia de marketing para su banda, lo cierto es que cuando la banda irlandesa suba al escenario del Estadio Nacional, desde los parlantes emergerá algo más que música: los sermones de un hombre que declara abiertamente poseer un “complejo mesiánico”, como reconoció en un discurso a principios de mes frente al Presidente de Estados Unidos.
Y aunque Bush se limitó a elogiar a Bono e hizo vista gorda sobre el pedido de entregar un 1% adicional del presupuesto federal de EEUU para los pobres del mundo, su último encuentro con la nata de los líderes mundiales se enmarcó dentro del reflote de su carrera paralela: la de activista político. Y ese álter ego, el militante, también sube a los escenarios.
Durante las otras presentaciones del “Vértigo tour” (la gira que trae a los irlandeses a Chile) hay muchos minutos dedicados exclusivamente a la prédica social. Como cuando Bono tapa sus ojos con una venda donde se lee “coexist” (coexistir) junto a la cruz del cristianismo, la estrella de David y la media luna del Islam, o las imágenes en pantalla gigante que muestran sus reuniones con líderes mundiales, además de una petición al público para que envíe un mensaje de texto en apoyo a alguna causa humanitaria.
EL VÉRTIGO DE LA RIQUEZA
Todo ello se repetiría en nuestro país, junto a las reuniones ya solicitadas a DG Medios que Bono decida aceptar: con el Presidente Ricardo Lagos, donde podría estar presente la Presidente electa, Michelle Bachelet; con la Cámara de Diputados, que le ofreció su apoyo en la postulación al Premio Nobel de la Paz; y por último, el Consejo de Cultura, donde pretenden hacer una ceremonia con motivo de la Medalla Centenario Pablo Neruda otorgada a Bono en 2004, por la Embajada chilena en Dublín.
“¿Viste el DVD en Chicago? Hay un discurso larguísimo de Bono antes de tocar One. En un momento enfocan a The Edge y su cara lo dice todo. Está como pensando: ‘Ya, loco, quedó claro; termina’”, comenta el periodista y crítico musical Sergio Cancino, para quien la militancia de Bono no hace más que distraer de la música, verdadera causa de su estatus de “gran banda” durante los ’80. Y aventura una explicación: “Cuando uno tiene asegurada la subsistencia por seis generaciones más, la conciencia empieza a pesar y los rockeros entran en todas estas causas benéficas. Está bien que lo hagan, pero surge la sospecha de qué tan honesto es todo esto, cuando los tipos tienen cuentas bancarias con muchos ceros”.
Hay momentos clave en la carrera de U2, ligados a las mañas políticas de su líder. Con su tercer disco de estudio, “War” (1983), tuvieron un éxito tremendo en Europa, y pese a la buena acogida en el mercado norteamericano, los hits todavía eran esquivos al otro lado del Atlántico. Hasta que Bono realizó su homenaje a Martin Luther King, (Pride) In the name of love, y logró meter por primera vez un single en los Top 40 de la lista Billboard de EEUU.
Otro ejemplo: su penúltima placa, “All that you can leave behind” (2000), retrocedía lentamente en la lista de ventas Billboard, hasta empinarse en el lugar 108 para agosto de 2001. Al mes siguiente, las torres gemelas se fueron abajo, y U2 para arriba. Agotaron entradas en más de 100 conciertos de su gira “Elevation”, y cada vez que tocaron su canción “One” proyectaban los nombres de las víctimas del 11-S. Las ventas se dispararon, y “All that you can leave behind” alcanzó el puesto 25 del Billboard, a 67 semanas de su lanzamiento.
El cantante solicitó el 1% del presupuesto federal de los Estados Unidos para combatir el hambre y la pobreza en África. Hasta ahora, sólo ha recibido bonitas palabras de Bush.
LO QUE NO PUEDES DEJAR ATRÁS
En innumerables ocasiones, Bono ha relatado su experiencia en África, cuando luego de participar con U2 en uno de los conciertos “Live aid”, organizados por el músico Bob Geldof, visitó Etiopía junto a su esposa y se quedó más de un mes trabajando en un campo de refugiados.
Tampoco está en cuestión su manejo del tema africano. En un reportaje publicado por la revista “Time” en 2002, el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Paul O’Neill, relató su encuentro con el músico, quien lo sorprendió con la cantidad de datos sobre África que manejaba. Sus trabajo en el continente negro, especialmente con la organización DATA, que lucha contra el hambre y la deuda externa tercermundista, de la cual es cofundador, le valieron reconocimientos como “la persona del año de 2005”, también en la revista “Time”, junto a algunos cuestionamientos.
En la última edición con la revista inglesa “Uncut”, Paul Weller, ex líder de The Jam y Style Council, y colega de Bono en la grabación de la canción “Do they know is Christmas?” (destinada a recaudar fondos para África), dijo: “Todo eso de Bono convirtiéndose en el Papa... ¿qué mierda pretende con todo eso? Basura seudoamericana”.
Andy Zúñiga, vocalista de Lemon, el tributo chileno a U2, dice que “el activismo está ligado a la música, pero no es la causa de su éxito comercial”. El “Bono chileno” explica que al no ser un mensaje político partidista, “y centrarse en el amor o el discurso pacífico”, U2 ha sido capaz de generar simpatías transversales. Pero todavía se recuerdan las pifias que desató el 11 de febrero de 1998, fecha de su primer concierto en Chile, cuando subió al escenario a un grupo de integrantes de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos. Según confirmó Francisco Leiva, uno de los administradores del sitio de Internet u2chile.net, a su página han llegado peticiones de contacto con la banda “exigiendo una entrada al ‘Golden circle’, porque dice que son hijos de detenidos desaparecidos”.
Así, cubierto de galardones –a los cuales habría que añadir los cinco premios Grammy obtenidos el miércoles con su último álbum, “How to dismantle an atomic bomb”–, llegará a Santiago San Bono y su séquito, a ofrecer el recital de las entradas más caras de toda la gira “Vertigo”, entradas que por cierto todavía muchos de los que compraron por Internet no reciben (pese a incluir un recargo por servicio de despacho). Como explicación, vaya la declaración de Bono cuando presentó su última campaña pro África, “RED”, junto a Giorgio Armani, American Express, Converse y Gap: “Hacer el bien resultará finalmente un buen negocio”.
posted by Pensando el mundo | 8:44 a. m.
1 Comments:
Disculpa pero acabo de leer un comentario tuyo en el blog de marguirot y ya que allí no puedo decir nada lo hago acá; para empezar yo conozco al famoso Bernardo y aunque no es santo de mi devoción creo que se les pasa la mano con las descalificaciones, yo he conocido hombres que han hecho cosas muy similares y hasta peores y no visten ningún uniforme lo que quiere decir que en la viña del señor hay de todo y no tiene nada que ver que sea militar o algo parecido todo va en la forma de ser y la formacion de cada uno, que pena que estas niñas Marguirot y karlita Linda hayan quedado tan marcadas y amargadas por este hombre que lo único que le pasa es que hasta ahora no se ha enamorado quizás porque simplemente no ha conocido la mujer para él y estoy segura que hasta sus extravagantes requisitos son nada más que una coraza que se ha formado para que no lo hieran no es el modo está claro pero creo que lo único que busca es formar una familia porque los años se pasan muy rápido ah! y que no tenga a sus papás vivos no es un motivo para descalificarlo como lo hace Karlita, afortunadamente yo tengo los míos vivos pero si no los tuviese quizás tambien me protegería de alguna forma...y si ralla la papa con lo de la plata u otros rollos es sólo inseguridad que al parecer ninguna de sus amiguitas hasta la fecha ha logrado quitársela....sorry nuevamente por la intromisión pero tenía ganas de decir esto...
saludos
Piel de Angel
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